domingo, 3 de junio de 2012

La Cueva de los Cristales




Un bosque de cristales de selenita (yeso purísimo), los más grandes del Mundo de mas de 14 metros de largo y 2 metros de espesor. Un mundo irreal más allá de la fantasía, más allá del ensueño. Una cueva infernal, a 50° C de temperatura y 100% de humedad, donde las posibilidades de sobrevivencia del ser humano se reducen a sólo unos cuantos minutos.



Una gruta todavía sin explorar. Una maravilla de la naturaleza descubierta por azar, muy frágil y misteriosa.Es difícil recordar un descubrimiento geográfico más importante en los últimos años, tal vez sólo comparable con el de las fuentes del Nilo.



La Mina de Naica se localiza en la población de Naica, Chihuahua, México .

De las cámaras que alojan estos cristales, únicamente la denominada Cueva de los Cristales está abierta al pública, la cámara que contiene las formaciones de mayor tamaño tiene una temperatura demasiado elevada para que puedan entrar personas en ella, esto ha llevado a que hasta el momento se hayan hecho muy pocas investigaciones sobre su origen y composición.



Paso de Venus ante el Sol: una oportunidad única de observar otros planetas

















El pasaje de Venus por delante del Sol el 5 y 6 de junio, un fenómeno excepcional que no volverá a ocurrir en 105 años, será una oportunidad única de observar planetas lejanos donde puede existir vida, señalaron astrónomos, publicó el portal de Terra Perú,

El inicio del tránsito será visible en América del Norte, América Central y la parte norte de América del Sur a última hora de la tarde del 5 de junio, siempre y cuando el cielo esté despejado. El final del fenómeno no se verá en estas regiones debido a la puesta del sol.

Todo el pasaje de Venus delante del Sol podrá verse en Asia Oriental y la zona del Pacífico Occidental. En Europa, Medio Oriente y Asia del Sur se verán las etapas finales de este pasaje a medida que vaya amaneciendo en la región el 6 de junio.

El fenómeno podrá verse a simple vista, indicaron los astrónomos, recordando siempre que debido al riesgo de ceguera o daño permanente en la vista, no se debe mirar directamente al Sol sin un filtro apropiado.

"Nos da la oportunidad de estudiar con gran detalle lo que estamos observando mucho más lejos (de nuestra galaxia, la Vía Láctea) y nos da más confianza en nuestra capacidad para interpretar las señales que detectamos", dijo a la AFP el astrónomo Rick Fienberg, de la Sociedad Astronómica Estadounidense (AAS, por sus siglas en inglés).

El próximo pasaje de Venus entre el Sol y la Tierra no volverá a suceder hasta dentro de 105 años, en 2117. Este tipo de tránsito ocurre de a pares en intervalos de ocho años y no vuelven a aparecer en más de un siglo. En el siglo XXI el último fue en 2004. No hubo ninguno en el siglo XX.

"El pasaje de Venus delante del Sol es exactamente el mismo fenómeno que capta el telescopio (estadounidense) Kepler al orbitar otras estrellas cuando sus planetas transitan por delante de ellas", explicó.

Sin embargo, en el caso de estos exoplanetas, planetas lejanos que no orbitan alrededor del Sol, "su estrella no es más que un punto de luz porque están muy lejos de nosotros y por eso es difícil ver qué pasa", dijo el astrónomo Alan MacRobert, editor de la revista Sky and Telescope.

Todo lo que se ve cuando un planeta pasa por delante es una ligera disminución del brillo de la estrella, precisó a la AFP.

Pero la luz de la estrella que atraviesa la atmósfera de esos exoplanetas deja una "huella" espectrográfica que permite reunir información valiosa sobre su composición, agregó MacRobert.

"Podremos hacer mediciones de la atmósfera de Venus durante su pasaje delante del Sol y ver qué tipo de señales se obtienen tomando medidas similares de exoplanetas que pasan delante de su estrella, y luego comparar los resultados sabiendo que en el caso de Venus son exactos", dijo por su parte Gerard van Belle, un astrónomo del Observatorio Lowell (Arizona, suroeste).

Feinberg precisó que los primeros y últimos 20 minutos del pasaje de Venus, que durará en total seis horas y media, serán los mejores momentos para observar el fenómeno, porque entonces la luz solar a través de la atmósfera de Venus formará una especie de capa en todo el planeta.

"Es entonces que los astrónomos tratarán de medir la composición de la atmósfera de Venus", añadió.

Los expertos creen que la galaxia está llena de miles de millones de planetas rocosos que podrían permitir la vida. La mayoría aún no fueron descubiertos por los terrícolas, y se encuentran tan lejos que serían imposibles de alcanzar con la tecnología moderna.

El catálogo más reciente lanzado por el telescopio espacial Kepler de la NASA en marzo mostró un total de 2.321 candidatos a planetas orbitando 1.790 estrellas.

Diez de los 46 candidatos a planetas que podrían tener agua líquida tienen un tamaño similar a la Tierra, según la NASA. Pero en la mayoría de los casos, los científicos no tienen detalles sobre la atmósfera de estos planetas.

Sorprendente cueva en China





Esta colorida cueva tiene más de 500.000 años. Está repleta de estalactitas y estalagmitas creadas por la deposición de carbonato. Lo atractivo es que en su interior se han instalado luces de colores que crean una atmósfera mística e increíble, un espectáculo que conjuga la belleza de la naturaleza y el avance tecnológico.

En el interior de la cueva se encuentran una serie de inscripciones que narran historias, leyendas, relatos y poemas, que datan de la Dinastía Tang.

La cueva queda en la localidad de Guilín situada al noroeste de la Región Autónoma Zhuang de Guangxi, en la República Popular China.